Aventura del Supermanu en Once
mapa del universo (fuente: internéc)
facsímil del mapa que el dios Google facilitóle al Supermanu
Esto que aquí contamos
es muy pero muy cierto
et verdadero
Ocurrió en el
por entonces llamado
Planeta Tierra
Dos mil y diecinueve
Años después
de la primera Venida
del Cristo
y otros cientos de años
después del Buda
En esa época había lluvia,
nieve
y viento
y estaciones también, cuatro
estaciones:
ongoño, primavera,
invierno y lasagna
Lo/s días se contaban por siete
empezando por el
apodado Lunes,
siguiendo con el Martes
y luego el Miércoles,
para acabar con el Jueves, Viernes,
Sábado et Moringo
El día se dividía en horas
siendo una hora
la unidad de tiempo
que expresa la vigésima
cuarta parte
de un día solar redondito
--mashomeno
Por estas épocas
los humanos se comunicaban todo el tiempo
utilizando, por ejemplo,
teléfonos celulares, tablets, y también otros cachivaches
Un teléfono es: "...un dispositivo
diseñado para transmitir
señales acústicas a distancia
por medio de señales eléctricas",
leemos en wikipedia
Un telefonoco, perdón
un teléfono móvil,
teléfono celular, o
simplemente un móvil, a secas,
es: "...es un teléfono portátil
que puede hacer y/o recibir llamadas
a través de una portadora de radiofrecuencia,
mientras el usuario se está moviendo o ladrando
dentro de un área de servicio telefóbico.
El enlace de radiofrecuencia establece
una conexión con los sistemas de conmutación libres
de un operador de telefonía móvil,
que proporciona acceso a la
red telefónica pública conmutada una seguridad interna invulnerable.
La mayoría de los servicios
de telefonía móvil modernos
utilizan una arquitectura de red celular, esquema piramidal
onda herbal life...",
seguimos leyendo en wikipedia
Respecto del término "modernos"
podríamos debatir horas, y horas,
no obstante, focalicémonos en nuestro héroe,
el mancebo Supermanu, ser un tanto inquietante
Supermanu era alto, "... peludo, suave;
tan blando por fuera,
que se diría todo de algodón;
que no lleva huesos", por citar a un
autor clásico
Amén de no poseer huesos, ni
cartílagos, sí poseía músculos
y toda clase de cablecitos
transportadores de agua, azúcar
y sulfato ferroso
en partes iguales
Este pequeñuelo, alto, sin embargo,
es decir que lo de pequeñuelo
es un giro lingüístico,
era más o menos de clase media,
esto es: pertenecía a la franja
aglutinante de la sociedad peronista
una suerte de dulce de leche
cohesivo
del alfajor de maicena
colectivo,
si no nos ponemos en exquisitos
Por estas época el peronismo era
por así decirlo la sal de la vida
e incluso el azúcar
Peronismo indica una forma
gregaria y lúdica de vivir
en comunidad organizada
y bastante pacífica
procurando el bienestar común
y comiendo, por ejemplo,
empanadas
Supermanu poseía muchos poderes
fácticos e ideales
pero también poseía celulares
de uno de estos adminículos
hablaremos ahora mismo
Ocurre que el Supermanu
hallábase en el tren subterráneo
es decir en una de esas lombrices metaloides
que transportaban gente
bajo la superficie terrestre
Hete aquí que le "hurtan
magistralmente" del bolsillo
su teléfono celular y/o
móvil
El Supermanu no se arredra
ante las malas nuevas
y apela al sistema satelital
de rastreo del chirimbolo,
para geolocalizarlo
En esa misma época, un señor
llamado Martín Google, semidiós
regordete y con lentes
gobernaba gran parte
de la tierra y sus alrededores
Desde el espacio exterior
era capaz de detectar
movimientos y ubicaciones
de cosas y personas
Fue así que el Supermanu
ni lento ni perezoso
preguntóle a este don Google:
"Oh, Señor de las Posiciones
de las gentes y Personas
sobre la superficie Terrestre,
oh, gran Ameba informática,
esponja metafísica, etc, etc,
decidme, si no os molesta
y de forma concreta
¿dónde fue a parar
mi celular?
Indicadme, si cabe,
¡cuáles son sus coordenadas
actuales?"
A lo que don Google
con voz metálica
neutral et robótica
respondióle simplemente
diciéndole que se hallaba en Once
Once, como todo el mundo sabe,
es un fragmento de Buenos Aires
ubicado en el corazón mismo
de Barbanegra
Citando nuevamente a la Wiki,
que cariñosamente es Pedia,
gran fuente de sabiduría
y afines de la época:
"...Once se caracteriza
por sus numerosos comercios de ofertas múltiples y bajos precios simulados,
y abarca varias áreas y volúmenes comerciales
de míticas baratijas y tantes oropeles inconmensurables.
Su nombre proviene
de la terminal de ferrocarril situada en el centro de la zona,
de nombre Once de Septiembre, que a su vez viene
del 11 de septiembre de 1852,
fecha en la que el Estado de Buenos Aires
se separó del resto de la República, por decisión propia.
Septiembre es un mes que llueve,
por decirlo suave".
En Once, entonces, abundaban de a racimos siderales
las míticas galerías comerciales,
incluidas aquellas especializadas en la reventa
de celulares robados y cosas por el estilo
violando toda ley y/o norma.
El Supermanu contaba con la palabra de don Google,
y además tenía un mapa, también proveído
por la misma divinidad, del que aún se conserva
una impresión en escala de grises
en el museo de las cosas impresas.
Valiéndose de la dicha copia, y aupado
en su propio taburete de autoestima
y, por qué no, gallardía,
bizarría,
e incluso
potencia sexual freudiana
reprimida
adentróse el Supermanu
en la galería comercial en donde,
sin quitar lo cortés ni lo valiente,
el mapa googliano indicaba
con aproximación inquietante
que su celular se hallaba
justo ahí en medio de una manzana
que no es una fruta
sino una medida de superficie
que equivale a:
"...un cuadrado de 100 varas, es decir
10 000 v² (10 000 varas cuadradas) (...) siendo una
vara española aproximadamente
0,836 metros,
y elevando al cuadrado dicha igualdad
podríamos aclarar que
1 vara cuadrada = 0,698896 metros cuadrados,
es decir dos palmitos y medio, masoméno
etcétera, etcétera..."
Adentróse el Supermanu en boca de Lobo
por decirlo suave,
Recibiólo un peruano,
es decir un ciudadano del Perú
residente en Buenos Aires,
Indicóle el susodicho que debía
si sus dichos de hurto magistral
eran ciertos
dar aviso a la "cana", que en
buen lunfardo es la Polecía
Llamó pues
el Supermanu
a un agente de la ley
al azar
Nos cuenta en sus Memorias
el plebeyo jovenzuelo:
"El poli de la ciudad cae
y me dice:
--Tenés que ir
a hacer la denuncia
a la Fiscalía
de acá a dos
cuadras--.
Se puso denso
Porque está lleno
de soldaditos
que van y vienen
con celus robados
Y la galería está en la puerta
de una de las bocas del Lobo...
ahí todos son celus
robados
y cosas ilegales
Tremendo
Me majulearon*
jajajajajajaj (risa desaforada)
Fui primero haciéndome el boludo**
que buscaba algunos modelos
alternativos
de teléfono...
El mío
tenía un rayón;
el plan era tenerlo en la mano
y recuperarlo atléticamente
huyendo despavorido,
por algún punto de fuga;
el tema es que don Google
no me dio la localización
precisa,
y había como 30 locales
uno más fantasma que el otro.
Entonces el peruano
me lleva hasta su local,
había picado,
pero en un intervalo lúcido
me dice no
ahorita no
ahorita no
Está cerrando, ven a la tarde,
y ahí cerraron filas
todos los que daban vueltas
ululaban a la luna
y les saltó la ficha
--sentía que estaba tratando
de rescatar mi celu
de una red de trata--
y bueh, ahí me puse denso
y fui negocio por negocio
diciendo que quería recuperar
mi celular
que les tiraba unos mangos***
pero que si no perdía
el laburo
y ahí cayó la cana
y no recuperé mi celular
tuve que comprar uno nuevo
que es una poronga****
y tiene un predictivo del orto..."
(Memorias del Supermanu, capítulo XV,
página 135)
*Majulear: acción de producir majules en la cabeza de alguna persona, manijeándola bocha.
**Boludo: coglionazzo.-
***Mangos: dinero, vil metal. O papel. O transacción bancaria. Ya analógica, ya cuántica, ya binaria.
****Poronga: Mandingo, bondiola.
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