peutatera
Verso 1 El terapeuta solía relajarse al anochecer, oshendo mantras budistas, dejando el mundo caer. Su mujer le hacía masajes en las rodishas sin hablar, y mientras bajaba la luna solía murmurar: Estribillo Vivimos una época que de tan cristalina se quiebra, se quiebra. Sabemos lo que está mal pero igual la culpa se queda. Y el destino ahora es tiernamente manifiesto. Verso 2 El incienso sigue girando, la taza de té ya está fría, y nadie escribe el futuro con tinta que no se desvía. Estribillo Vivimos una época que de tan cristalina se quiebra, se quiebra. Sabemos lo que está mal pero igual la culpa se queda. Y el destino ahora es tiernamente manifiesto. Puente Y es tan suave, y es tan cierto, como un error que llega lento. Tiernamente manifiesto… como un espejo sin reflejo